domingo, 13 de mayo de 2007

Titirimundi


Siempre que se hace una historia
se habla de un viejo, de un niño, o de sí.
Pero mi historia es difícil,
no voy a hablarles de un hombre común.
Haré la historia de un ser de otro mundo,
de un animal de galaxia.
Es una historia que tiene que ver
con el curso de la vía Láctea.
Es una historia enterrada,
es sobre un ser de la nada

Nació de una tormenta,
en el sol de una noche,
en el penúltimo mes.
Fue de planeta en planeta
buscando agua potable,
quizás buscando la vida
o buscando la muerte,
eso nunca se sabe.

Quizás buscando siluetas
o algo semejante que fuera adorable,
o por lo menos querible, besable,
amable.

No hay comentarios: